Hay bandas que uno realmente echa de menos, otras que un
agradece que se hayan separado, unas que uno está esperando el fin definitivo,
otras que deseamos volver a ver. Hoy, 2014, hay un grupo que para mi pertenece
a esta primera categoría: Sonic Youth.
Indie indie alternativo
indie alternativo…hay momentos en que todo colapsa, ya en los 90 con el peak
del grunge y el rock alternativo, ese lugar en la música de toda una generación
que no contenta con los excesos del pop, buscaba a gritos un escape. En los 80
pasó pero no llegó a muchos, en los 90 fue distinto, hasta el punto de
saturarnos por completo, pues esa vieja nostalgia noventera realmente vale la
pena por ciertas agrupaciones (la mayoría eran puras bazofias, al igual que en
los 80) y uno de estos era Sonic Youth. Ya en 2011, después de tanto girar, de
tantos álbumes llenos de ácido juvenil, un pop decadente y el impulso por la
experimentación en base a lo mismo (lo cual tiene su gracia) la banda decidió poner
fin a su carrera. Rumores de un quiebre por infidelidades entre Thurston Moore
y Kim Gordon del que no entraré en detalles.
De entre todos los números undeground ochenteros, fueron los
más arriesgados. De entre todas bandas noventeras alternativas, fueron los más auténticos.
Y ya a finales de los 2000, cuando uno menos esperaba de ellos (pues habían dado
mucho) lanzan el que, para mi, es uno de sus mejores trabajos: The eternal. Ese
álbum, lleno de momentos inspiradísimos y notables, del clásico Sonic youth, de
momentos noise intercalados con voces suaves y ritmos pegajosamente burdos, fue
un golpe duro a la industria pues puso en la mesa nuevamente, la importancia de
hacer un álbum por sobre la excesiva importancia que las bandas alternativas,
indies, etc le daban a sus singles y en la manera en cómo distribuirlos. Para
mi The eternal suena como a una mirada retrospectiva de su juventud sónica en
sus años dorados, sin los típicos clichés que esto conlleva, al contrario,
redescubriendo para ellos mismos la importancia de ir más allá cuando los años
te pesan. Cátedra a sus contemporáneos. La canción del día puede ser cualquiera
que se encuentre en este álbum, pero los dejaré con una notable interpretación
en vivo de Antenna en el Later…with Jools Holland.
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